sábado, 30 de enero de 2010

FEDERICO CAMPBELL

FEDERICO CAMPBELL
La belleza de pensar y escribir

Rael Salvador
rael_art@hotmail.com
“La verdad es lo que resiste al saber”.
Lacan.


¿Qué amable imán de circunstancias nos pone de nuevo en la misma mesa?
Una mesa parlante, bogante de intenciones y palabras que encuentran en los libros sus puertos de partida y sus puertos de llegada.
Habíamos coincidido en dos ocasiones en la Feria del Libro de su tierra natal, Tijuana, él presentado como uno de los grandes -- en fin, tiburón de las mareas en el abisal océano de las letras --, yo -- charal de brillos primarios -- anunciado como uno de los chicos.
Federico Campbell, aunque finja sorprenderse, es uno de los escritores más queridos de Baja California, así como del resto del país, por no hablar de las tribus extranjeras que aclaman su sólida trayectoria intelectual.
-- Uno, ocupado como está en escribir y dar conferencias, no puede dimensionar esos privilegios -- comenta, diseñando feliz el óvalo de su rostro.
En ese gesto fugaz, de levantar la cabeza y sonreír, se reúne el equilibrio portentoso de su memoria y esa especie de humildad filosófica que es su nostalgia disfrazada.
Al escucharlo de nuevo, después de haberlo leído y releído durante tantos años, le comento a su sobrino Eduardo Campbell, su acompañante en Ensenada, que Federico conforma la esencia de la sabiduría humana y que está aquí, ante nosotros, sólo para demostrarnos la alegría de sus dones: la belleza de pensar, aunada a la capacidad de escribir y vivir: escribivir.
-- Me queda claro -- sustenta Federico, ajustando la tibieza de su té al rumor del frío --, la ausencia trágica de Fernando Jordán invita a muchas especulaciones. Transpeninsular (Punto de Lectura, 2008), mi novela sobre el tema, propone, sugiere, insinúa… Y, como una tesis sin pruebas bacteriológicas, sólo puede encomendarse a las pautas que aconseja la retórica en su parte más inventiva: la argumentación.
Lo entendemos, no podemos determinar qué fue lo que sucedió esa noche de viento oscuro al autor de Crónica de un país bárbaro y El otro México: ¿Suicidio? ¿Asesinato? ¿Accidente?
En el cruce feroz de especulaciones (ensayo de hipótesis) se encuentra José Luis Aguayo, autor de Vida y obra de Fernando Jordán que, junto a Federico Campbell y Carlos Lazcano -- convocados por la ilustre escritora Olga Argón --, detallan pormenores que van desde la pruebas balísticas a la incredulidad de la carta póstuma.
-- Albert Camus -- rememora Campbell -- nos lo ha dejado escrito con mucha claridad: “No hay sino un problema filosófico realmente serio: el suicidio”. Y no sólo él, sino también la psiquiatría. En esa hora final, ¿era el Che Abente más importante que sus hijos o su ex mujer o su queridísima hermana? A ellos, en estas breves líneas finales, no los menciona.
Hemos pasado la noche en la mesa… Y, reabordándola de nuevo la mañana siguiente, no me cabe la menor duda que ésta -- la mesa parlante -- será trasladada al debate público la tarde del viernes 29, cuando en la sala Muñoz Acosta del CEARTE (Centro Estatal de las Artes, Ensenada), esté Federico con Aguayo y Lazcano, celebrando la estilística afortunada y el merito innegable del periodista y poeta mexicano Fernando Jordán.

1 comentario:

  1. Buena charla, oye esa foto es de Don Federico es tuya, la quiero tomar para un blog pero me gusta darle el crédito a los fotógrafos.

    saludosss

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